Sin título, 1978
Arcilla bronceada en viejo
20 x 25 x 20 cm
Colección particular
A diario le reconozco en ella.
Había coincidido en alguna que otra exposición pero fue en La Rambla cuando tuve ocasión de hablar detenidamente con él. El motivo era invitarle a una colectiva de artistas cordobeses que organizaba para el Ayuntamiento de Córdoba y que se mostraría en Manchester. Por supuesto accedió a participar, hablamos de arte, me leyó algunas poesías y compartió su profunda tristeza por la pérdida de Antonia, su esposa y compañera del alma. Al despedirnos insistió en regalarme esta escultura, le agradecí su generosidad intentando declinar el ofrecimiento pero no pude convencerlo de lo contrario. Han pasado casi cuarenta años y a diario le reconozco en ella.
ÁNGEL LUIS PÉREZ VILLÉN Doctor en Historia del Arte